DESPIDEN A UN EMPLEADO POR HACER PUBLICIDAD EN INSTAGRAM.
La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla La Mancha (TSJCLM) ha declarado procedente el despido de un trabajador que, estando de baja por ansiedad, ha sido descubierto por detectives anunciándose como diseñador web en Instagram.
El trabajador prestaba servicios para su empresa desde julio de 2021 y en noviembre de ese mismo año se cogió la baja médica.
Debido a la tardanza en su incorporación, los dueños de la empresa comenzaron a tener sospechas de que el empleado estaba realizando otras labores en su periodo de incapacidad laboral, por lo que contrataron a una detective durante tres semanas para seguir su actividad.
El informe de la detective, afirmaba que se estaba anunciado como “diseñador web y desarrollador de app web en Toledo”, información que estaba acompañada de una URL para dar veracidad a lo hallado.
La detective tras esto, quiso ponerse en contacto con él y solicitarle presupuesto para un proyecto.
En marzo de 2022 el trabajador recibió un burofax de la entidad para presentarse en las instalaciones.
La socia y el abogado de la empresa le explicaron que tenían pruebas de ello, pero él se negó, insistiendo en que no había prestado otros servicios durante su incapacidad.
En abril de 2022 recibió un burofax comunicándole su despido por causas disciplinarias. Le explicaron que había cometido una falta calificada como muy grave en el Convenio Colectivo.
El trabajador interpuso demanda contra el despido disciplinario, pero finalmente el Tribunal ha calificado el despido como procedente.
Lo primordial en un despido disciplinario es poder demostrar el incumplimiento grave del trabajador, ya que la carga de la prueba recae en la empresa, y este es un claro ejemplo de cómo un despido bien documentado puede ser calificado como procedente.
